Bienestar
del alumno.
El bienestar está integrado en el día a día de Virtus College. En una comunidad unida y comprometida, los estudiantes crecen con confianza, equilibrio y propósito, guiados por mentores que les conocen, les retan y celebran sus logros.
Una cultura de cuidado, conexión y comunidad.
Creemos que el sentido de pertenencia es la base del éxito personal y académico.
Lo que realmente nos diferencia es la fortaleza de nuestras relaciones y el cuidado genuino que inspira todo lo que hacemos. En nuestra comunidad, los estudiantes son conocidos como individuos únicos y reciben el apoyo necesario para prosperar no solo en sus estudios, sino en todos los aspectos de su vida.
Estamos orgullosos de formar parte de una comunidad cálida y vibrante, donde los alumnos son animados a ser ellos mismos, cuestionar ideas y colaborar con un propósito.
Esta cultura de respeto mutuo y confianza se alimenta gracias a profesores que, además de ser expertos en sus materias, son mentores excepcionales, capacitados para guiar a los jóvenes en una etapa vital de transformación.
Creemos que la felicidad y las altas expectativas son compatibles.
La ambición académica y el bienestar personal van de la mano. Si bien mantenemos altas expectativas para todos nuestros estudiantes, nunca perdemos de vista la importancia de la felicidad, el equilibrio y la autoestima. Nuestro Sistema de Mentoría es central en esta filosofía, situando el cuidado individual y el desarrollo personal en el corazón de la experiencia educativa.
En colaboración con STEER Education, adoptamos un enfoque proactivo del bienestar, ofreciendo a los estudiantes las herramientas necesarias para conocerse a sí mismos y afrontar los retos con resiliencia. Todo el personal recibe una formación exhaustiva en protección y salvaguarda, garantizando que cada alumno se sienta seguro, escuchado y apoyado.
A través de la mentoría, también fomentamos que los estudiantes asuman roles de liderazgo, ya sea en clubes gestionados por alumnos, en debates o en el Consejo de Estudiantes, desarrollando así un profundo sentido de propósito y espíritu comunitario. Nuestro objetivo es capacitar a cada alumno para que florezca como una persona reflexiva, capaz e íntegra.
Un uso regulado de la tecnología para mejorar la concentración y la disciplina.
En un mundo lleno de distracciones digitales, nos comprometemos a ayudar a los estudiantes a construir una relación saludable con la tecnología. Los teléfonos móviles se recogen cada mañana y se devuelven al final del día, asegurando que los alumnos permanezcan presentes, concentrados y plenamente involucrados en la vida escolar.
Los iPads de los estudiantes cuentan con software de protección que monitoriza y limita el acceso externo, creando un entorno de aprendizaje seguro y enfocado. Estas prácticas no buscan restringir, sino fomentar la claridad, la disciplina y el bienestar digital en una era que lo demanda.
